El Garito del tio Sam

No podía ser de otra manera y así será, la primera entrada, aparte de la presentación, del Blog no podía ser otra que contar la historia del “Garito del tio Sam” ya que aparte de ser el lugar que dio origen a la idea para crear este Blog es uno de esos lugares de peregrinaje para mi y para mis colegas, que si bien no son demasiados, son los justos y necesarios para crear interesantes temas de conversación y debate.

Quizá exagere demasiado llamando al “Garito del tio Sam” lugar de peregrinaje siendo como es un lugar tan común, cuya presencia no sorprende ni impresiona a nadie, pero es precisamente eso lo que le hace ser en cierta manera algo tan importante porque la vida habitualmente se basa en esas pequeñas cosas que nos alegran el día, que si bien son comunes y rutinarias, cuando faltan se echan de menos. El garito del tio Sam físicamente es una cafetería que abre hasta altas horas de la madrugada que se llama realmente La Algodonera por estar situada en paralelo a las dos calles que forman los edificios de La Algodonera, llamada así porque antes de que fuesen fabricados los edificios ahí había una fabrica de Algodones. No es nada del otro mundo, el café no tiene nada de especial, tampoco tienen una amplia carta de vinos ni demasiadas cervezas donde elegir, quizás si por algo destacan es por su amplia variedad de zumos, que entre Kaith y Mari han ido pacientemente descubriendo y degustando cada vez que venían, por lo que estoy seguro de que no destacan es por su hilo musical, que yo llamo la cenefa musical, siempre se repiten las mismas canciones en el mismo orden, se podría considerar que repiten continuamente los últimos éxitos del pop-rock nacional pero considero que Alaska lleva mucho tiempo Bailando y que demasiadas generaciones han escuchado a Bosé y su Amante Bandido. Sin embargo probablemente destaque sobremanera por algo que considero muy importante y es lo tranquilo del ambiente, con una tenue iluminación y mesas muy separadas en las que se puede hablar en un ambiente distendido y cordial, un ambiente tan cómodo que da pie a que se puedan tratar infinidad de temas en confianza y sin tabúes, como no es plan de que en la segunda entrada del Blog ya comience a engañar a los lectores diciendo que solo se tratan temas serios en la que todos los contertulios nos comportamos como eruditos, que hablamos como notables y damos cátedra sobre cualquier cosa al primer LERDO DE CIUDAD que se nos una al grupo como si fuéramos aquí de la familia Vázquez, os diré que en el garito del tío Sam los temas serios se tratan con seriedad pero sin chulería asumimos que no estamos en posesión de ninguna verdad absoluta y eterna, aunque en cierto modo quizá si que pequemos un poco de creer que poseemos ideas firmes y sólidas pero bueno da igual, siempre hay lugar para las risas y sobretodo las paranoias, porque a ciertas horas de la madrugada uno deja de lado la seriedad para dar paso a la broma o quizá mejor dicho a estúpidas pero entrañables y graciosas divagaciones ¿Cómo era aquello de la comparación de un tomate y los Brothers Mari?. En uno de estos momentos de broma/paranoia fue como bautizamos a lo que antes llamábamos “La cafetería de debajo de mi casa” como el garito del Tio Sam, esto se debió a que el camarero ya nos conocía y entonces ya no nos tomaba nota, directamente nos traía lo de siempre y en unos de esos días épicos donde el tema de conversación había sido realmente bueno, con muchas teorías ideas y en definitiva un acalorado debate no se nos ocurrió otra cosa que para seguir la tertulia decirle ponnos otra Sam, parafraseando la famosa escena de Casablanca, entonces como aquella noche se había hablando sobre conspiraciones Americanas al camarero le quedo ya el apodo de Tio Sam, lo de Garito se le añadió a posteriori supongo que para darle un pequeño toque misterioso aun mas si cabe al lugar.
Este verano seguramente habrá muchas e interesantes tertulias allí, seguramente ya no detrás de un café, hace demasiado calor, pero si ¿porque no? detrás de una fría y refrescante Kronenbourg para refrescar el cerebro después de un caluroso día de Playa.

Esta entrada es un pequeño homenaje a un lugar único y a un colega y contertulio también único, aunque tampoco me olvido de los demas ;)